Si nunca has hecho surf y tus amigos te acaban de invitar a pasar con ellos sus vacaciones de surf, tu primer instinto podría ser rechazarlo. Después de todo, pasar tus vacaciones haciendo surf suena menos como un retiro divertido y más como un montón de ejercicio y aprendizaje para sus días de relax. Pero estas equivocado. Algo deben ver los surfistas para lanzarse a la aventura en busca de emoción. ¿verdad?

 

En realidad no es tan peligroso 

Sorprendentemente, el surf no es tan peligroso como el resto de deportes de aventura. Muchos expertos coinciden en que es el más seguro de los deportes de aventura populares, incluso más seguro que el snowboard. Es cierto que hay un riesgo para el surfista cuando está en el agua, pero ningún deporte está exento del riesgo de lesiones. Ese es el precio de la diversión, y con la capacitación adecuada gracias a las escuelas de surf, campamentos de surf o incluso clases privadas de surf, el precio no es elevado.

Sin embargo, hay algunas cosas de las que debes tener cuidado antes de salir corriendo y meterte en las grandes olas.

 

Sé sensato

Si eres un principiante que trata de impresionar a una chica yendo por la ola más grande que ves, no es solo una estupidez, es un suicidio. Necesitas una formación adecuada y mucha experiencia antes de poder enfrentarte a las grandes olas. Del mismo modo, no intentes hacer giros justo después de que hayas aprendido a dibujar tu línea. La conclusión es, reconoce y acepta tu nivel de habilidad actual y aprende y mejora de manera constante. No te apresures. Llegarás a tener un buen nivel poco a poco.

 

Estar preparado

Los accidentes ocurren. Esta es una situación inevitable de la vida. Aún así, te puedes ahorrar muchos problemas si toma algunas precauciones básicas.

Número 1: NUNCA VAYAS A SURFEAR SOLO. Nunca se sabe cuándo tu pierna podría torcerse, o cuándo podrías resbalarte y ser arrastrado por el agua. Tener a alguien cerca para ayudarte puede significar la diferencia entre la vida y la muerte.

Número 2: No comprometer el equipo. Tener una tabla barata está bien, siempre y cuando sea lo suficientemente resistente, pero ahorrar unos cuantos euros adicionales comprando una tabla desgastada no es la mejor idea.

Número 3: saber nadar y nadar bien (aunque no hace falta decirlo).

 

Sé observador

La mayoría de los surfistas estarían de acuerdo en que la parte más peligrosa del surf son las colisiones con otros surfistas. Imagina que te están golpeando la cabeza con una tabla que viaja de 15 a 20 km/h. No es una idea agradable. ¿Cómo se puede evitar esto? Sencillo. Estar atento. Antes de remar hacia una ola para montarla, realice una exploración rápida a su alrededor. ¿Alguien más también está intentando montar esa misma ola? ¿Estás en un espacio abarrotado de más surfistas? Si es así, entonces probablemente deberías mudarte a un lugar diferente. No todos serán tan cuidadosos y lo mejor es no arriesgarse a tener una lesión.